Catedral de Córdoba. Turismo- Cultura

Catedral de Córdoba. Turismo- Cultura

Cuadro en el ábside de la Catedral de Córdoba.

Solicitado a España por el Obispo de Córdoba San Alberto.


FOTO DE LA CATEDRAL DE CÓRDOBA DEL 1852.

La foto más antigua de Córdoba, tomada en 1852. Copia existente en el Archivo General de la Nación. En el remate de las escalinatas se observan los leones de piedra sapo, en la actualidad se encuentran en el Museo Sobremonte de la ciudad de Córdoba.

Historia y Planos de la Catedral de Córdoba – Argentina

GUÍA TURÍSTICA

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Decoración y Restauración

En la segunda década de nuestro siglo, se iniciaron las obras de pintura y decoración, que cambiaron el interior de la Catedral Son murales, sobre bocetos del catamarqueño Emilio Caraffa, que contó como colaboradores a Manuel Cardeñosa y Carlos Camilloni, entre otros.

Los motivos principales son la “Visión del Santísimo Sacramento”, y “El Triunfo de la Iglesia”. En el crucero, “La Asunción” y “La traslación de San José”. En las pechinas, los cuatro Evangelistas, y dentro de la cúpula, algunos profetas, y más arriba “La Gloria”.


En 1954 la Catedral fue restaurada exteriormente, al demolerse las construcciones que ocultaban sus muros sud y oeste, pero quedó sin remodelarse en la parte norte, donde una edificación sin valor, que lleva el Nº 64 de calle Independencia, frente a la Plaza San Martín, desentona y afea el contorno catedralicio. Las topadores municipales respetaron esos ladrillos, por pedido del Sr. Arzobispo Mons. Dr. Fermín E. Laffitte, pues en ella funcionaban oficinas parroquiales.


La Catedral de Córdoba es Monumento Histórico Nacional, por decreto Nº 90.372, del año 1941. Luis Roberto Altamira la definió como “flor de piedra en el corazón de la Patria”.<br />S.S. Juan Pablo II, en abril de 1987, profundamente impresionado por nuestra Iglesia Madre, al dejarla dijo: “Tienen una Catedral muy linda, deben cuidarla mucho”.

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SAN JOSÉ GLORIOSO

Cardeñosa, Manuel Nació en Villa Herreros, provincia de Àvila, España, en 1860, y falleció en Córdoba en 1923. En 1893 se radica en Argentina, estableciéndose en Córdoba, ciudad donde se desempeña como colaborador de Emilio Caraffa en la Academia Provincial de Bellas Artes, siendo designado Vicedirector en 1908.. Trabajó también en pintura mural dentro de la que cabe mencionar su obra La caída de Jesús, ejecutada en la nave derecha de la Iglesia Santo Domingo. Intervino en la decoración de la Catedral de Córdoba, obra a cargo de Emilio Caraffa, siendo responsable de La traslación de San José a los cielos en la bóveda derecha de la nave del crucero, y siendo responsable de la ejecución de Los Santos Apóstoles y La Gloria de José.